Odontopediatría
Es recomendable realizar revisiones bucodentales en los niños a partir de los 3 años de edad.
Es importante para ellos acudir para hacer de la visita al dentista algo natural y que sientan confianza con su dentista y el entorno de la clínica. Así comienzan a recibir tempranamente información acerca del cuidado de sus dientes.
En los dientes temporarios ("de leche") la acción lesiva de la caries es muy rápida y genera lesiones pulpares (afecta el nervio) con facilidad. Debido a ésto es ventajoso ver las caries cuando están en etapa incipiente para así poder evitar tener que realizar el tratamiento pulpar (del nervio).
Se recomienda disminuir los momentos de azúcar en los niños, es decir evitar la ingesta descontrolada de alimentos y bebidas azucaradas, dado que a mayor frecuencia de ingesta o momentos de azúcar la posibilidad de sufrir caries crece notablemente.
Al revisar los niños a temprana edad se puede realizar la detección precoz de anomalías de tamaño y/o posición de los maxilares, pudiendo dar así paso al tratamiento corrector correspondiente para normailzar el crecimiento maxilar. También se puede realizar la detección precoz de malos hábitos-interposición labial, lingual, succión de dedo, que pueden originar alteraciones en el desarrollo de los maxilares.
Cuando un niño pierde un diente antes de la edad óptima de hacerlo (puede ser por caries, por accidente, etc) es necesario acudir a la clínica para valorar la colocación de un mantenedor de espacio, aparato que nos permitirá conservar el sitio para el diente permanente que reemplazará en el futuro al diente perdido precozmente. Realizar éste procedimiento oportunamente evitará graves problemas ortodóncicos en el niño causados por la pérdida a destiempo de su diente temporal.